1001 cosas que todo el mundo debería saber sobre ciencia.- James Trefil (1938)

 

1.-Biología clásica

Clasificación de las cosas vivas

«120.-La gran tarea histórica de la biología ha sido hallar una forma de ordenar y clasificar las cosas vivas. Lo primero que debemos hacer si queremos comprender el enormemente complejo y variado sistema de cosas vivas  que pueblan nuestro planeta es hallar alguna forma de ponerles cierto orden, establecer cuáles están cerca unas de otras y cuáles no. Una pregunta típica que podemos hacernos es: "¿Es un ser humano más parecido a un pino o a un pez?" Debemos nuestro actual esquema de clasificación al naturalista sueco Carl von Linneo (1707-1778). Su esquema para la organización de las cosas vivas es como proporcionarle a una casa una dirección especificando país, estado, ciudad, código postal, calle y número de calle. De un modo similar, las cosas vivas son localizadas con sucesivos grados de precisión situándolas en categorías más restrictivas aún hasta que, al fin, llegamos a una categoría que la cosa viva no comparte con ninguna otra.

 121.-Ya no es "animal, vegetal o mineral". El viejo juego de las "veinte preguntas" empezaba siempre con esta información. La suposición en el juego era que todo era o bien no vivo (mineral) o bien vivo (planta o animal). En esta especie de amplia clasificación de cosas vivas, la de las "plantas" y los "animales" eran llamadas "reinos". Hoy, los biólogos hablan en general de cinco reinos distintos.

 Además de los reinos trascendentales de las plantas y de los animales, los científicos reconocen otros tres: el de las móneras (organismos unicelulares sin núcleo en la célula), el de los protistos (organismos unicelulares con núcleo en la célula) y el de los hongos (como los mohos y setas).

 Especificar un reino para un organismo corresponde aproximadamente a especificar el país en el momento de dar una dirección.

 122.-Los reinos corresponden aproximadamente a tres niveles de vida. Las móneras y los protistos son organismos unicelulares, con las móneras representando a los más primitivos (y presumiblemente los primeros en evolucionar). Los tres reinos multicelulares (el de los hongos, el de las plantas y el de los animales) utilizan cada uno una estrategia distinta para sobrevivir. Los hongos absorben lo que necesitan del entorno, las plantas producen nutrientes a través de la fotosíntesis y los animales consumen nutrientes comiendo plantas, hongos, o unos a otros.

 123. Los virus no encajan en este sistema de clasificación. Todas las cosas vivas que se hallan en los cinco reinos están formados por células. Los virus no, puesto que sólo contienen ácidos nucleicos y proteínas. ¿Están vivos? Resulta difícil decirlo y se trata probablemente más de un asunto de semántica que ninguna otra cosa. En cualquier caso, son ignorados (o puestos en una nota a pie de página) en la mayoría de las discusiones sobre clasificación.

 124.-Dentro de cada reino, los organismos se hallan agrupados en filums. Por ejemplo, en el reino animal hay docenas de filums que engloban a los gusanos, lamelibranquios, insectos y muchas otras formas "inferiores" de vida. Los animales más familiares pertenecen al filum de los cordados: animales con una médula espinal, y al subfilum de los vertebrados: animales con una columna vertebral. De un modo similar, el reino vegetal tiene muchos filums, incluidos los helechos, los musgos, las plantas con flores, etc.

 Especificar el filum o el subfilum de un organismo corresponde a especificar el estado cuando se facilita una dirección.

 125.-Aunque los vertebrados son los animales más familiares distan mucho de ser los más comunes. Puesto que nosotros somos vertebrados, tendemos a pensar que este subfilum es mucho más importante en el esquema de las cosas de lo que es en realidad. De hecho, la mayoría de las cosas vivas no son vertebrados: hay muchos más escarabajos que mamíferos, por ejemplo. Siempre señalo esto enarbolando un excelente libro titulado Los cinco reinos (de Lynn Margulis y Karlene V. Schwartz), que proporciona descripciones de todos los filums en todos los reinos. El libro tiene 374 páginas, ¡con sólo 4 páginas dedicadas a los cordados (animales con médula espinal)!

 126.-Los filums se subdividen en clases, órdenes y familias. Continuando la subdivisión en elementos más precisos, llegamos a esas tres categorías, que corresponden aproximadamente a la provincia, la ciudad y el distrito postal en el proceso de facilitar una dirección. Los vertebrados, por ejemplo, se dividen en clases como mamíferos, anfibios, reptiles, aves, etc. La clase de mamíferos se divide a su vez en varios órdenes como primates, roedores, carnívoros, cetáceos (ballenas y delfines), etc. Finalmente, el orden de los primates se subdivide en familias como los lémures, varios tipos de monos, antropoides y humanos.

 127.-Los organismos son denominados por su género y especie. La subdivisión final en la clasificación linneana es un género y especie. Eso corresponde a la calle y al número de la casa en una dirección. Los organismos del mismo género son similares entre sí, pero no pueden procrear unos con otros. Por ejemplo, el oso polar (Ursos marítimus) y el oso gris (Ursus horribilis) son ambos miembros del mismo género en la familia de los osos, pero no son de la misma especie. Los organismos que pueden procrear unos con otros son miembros de la misma especie.

 Los biólogos suelen dar normalmente sólo el género y la especie cuando nombran un organismo, pero todo el esquema de clasificación delineado aquí se halla implícito en ello. Un ejemplo familiar de este uso: Homo sapiens (hombre sabio); los modernos seres humanos pertenecen a este género y a esta especie.
[...]

 129.-Los seres humanos son los únicos miembros vivos de nuestro género y especie. El "pedigrí" humano es como sigue:  reino: animal; filum: cordados; subfilum: vertebrados; clase: mamíferos; orden: primates; familia: homínidos; género: homo; especie: sapiens.»

 

   [El texto pertenece a la edición en español de RBA Editores, 1993, en traducción de Domingo Santos. ISBN: 84-473-184-2.]